Ha pasado ya un mes desde aquel domingo de abril en el que un grupo de alumnas y alumnos del colegio María Inmaculada y su profesor de Lengua tuvieron la suerte de impartir un taller titulado "Una lengua de cine" en el incomparable marco del primer Foro Internacional del Español, gracias a la magia de Doña Díriga y a la generosidad de Ana y Espiral. Transcurrido este tiempo y con el poso ya sedimentado de tan bella experiencia como la de aquel día, es el momento de hacer memoria y dar cuenta de las emociones vividas en aquel encuentro.
Aquel domingo los jóvenes ponentes y su profesor nos dimos cita a tempranas horas de la mañana en las puertas del colegio con el fin de llegar a Ifema con tiempo de conocer el espacio y poder ensayar. La ilusión por lo que íbamos a vivir alguna hora después era palpable y lo fue aún más cuando llegamos a la sala donde se impartiría el taller y los alumnos se encontraron una mesa "muy profesional" (como dijo alguno) con micrófonos y sus nombres presidiéndola. Allí tuvimos la suerte de que la encargada de la sala nos facilitase al máximo toda la preparación atendiendo a todas nuestras necesidades. También apareció con antelación Ana, que junto a su pequeña nos regaló un reportaje fotográfico de lujo que compartimos más adelante. Y, poco a poco, la sala se fue ocupando con un público bastante familiar y, aunque no muy numeroso, muy acogedor y participativo.
Tras los ensayos y con los nervios a flor de piel, dio comienzo el taller. Los alumnos se ganaron al público relatando sus experiencias en proyectos de la asignatura de Lengua castellana y literatura surgidos a partir de las películas españolas O Apostolo y Arrugas. Además, estrenamos en exclusiva nuestros cortometrajes protagonizados por el muñeco original de la película O Apostolo.
No obstante, seguramente lo más bello de todo fue verlos interactuar con el público después de cada exposición, ayudando a que los asistentes pudiesen disfrutar de vivencias como las que ellos habían disfrutado en clase. Demostraron ser auténticos expertos del stop-motion guiando al público en la creación de pequeñas producciones que se pueden ver en este blog y, más tarde, motivaron a los asistentes en dinámicas de reflexión (lluvia de palabras asociadas a la tercera edad) e imaginación (mensajes para los "yoes" futuros del público y entrevistas a esos ancianos del mañana). El resultado fue extraordinario (como muestra de ello algunas fotos que compartimos aquí y que se pueden ver pinchando sobre la imagen).
Finalmente, el taller se clausuró con la ya clásica "Crítica 3x1", en la que se pidió a los asistentes destacar tres aspectos positivos y un aspecto negativo o mejorable del taller llevado a cabo. Las personas presentes fueron muy agradecidas y valoraron muy positivamente la labor de los ponentes. Después, tras los aplausos y la alegría de la tarea bien hecha, antes de despedirnos, tuvimos la suerte de poder realizarnos un fotografía "muy profesional" todos juntos.
Sin embargo, esta crónica se quedaría muy incompleta con tan solo la visión de este profesor y, por ello, qué mejor forma de concluir que conocer el punto de vista de los alumnos ponentes:
No obstante, seguramente lo más bello de todo fue verlos interactuar con el público después de cada exposición, ayudando a que los asistentes pudiesen disfrutar de vivencias como las que ellos habían disfrutado en clase. Demostraron ser auténticos expertos del stop-motion guiando al público en la creación de pequeñas producciones que se pueden ver en este blog y, más tarde, motivaron a los asistentes en dinámicas de reflexión (lluvia de palabras asociadas a la tercera edad) e imaginación (mensajes para los "yoes" futuros del público y entrevistas a esos ancianos del mañana). El resultado fue extraordinario (como muestra de ello algunas fotos que compartimos aquí y que se pueden ver pinchando sobre la imagen).
Sin embargo, esta crónica se quedaría muy incompleta con tan solo la visión de este profesor y, por ello, qué mejor forma de concluir que conocer el punto de vista de los alumnos ponentes:
Como ven, una experiencia increíble: para repetir.